martes, 13 de marzo de 2012

Llegan las curvas

Si estuviésemos en un viaje en carretera, sin duda estaríamos empezando a atravesar un puerto de montaña :)

Como atleta a tiempo parcial, cuando el trabajo se vuelve prioritario puede llegar a ser totalmente desesperante. Máxime cuando sabes que te faltan un montón de técnicas, y ves que llegan días de buen tiempo, pero que no tienes tiempo material para entrenar. 

Ayer fue uno de esos días, salí del cole a eso de las 7:30 y a las 8:15 tenia que haber acabado el entreno, por lo que con traslados y todo tenía menos de media hora para hacer un entreno de técnica de peso medio-decente (con 10 tiros, había que sacar conclusiones rápidas si se quería que sirviese para algo). Durante el camino a la pista en el coche, me iba preguntando a mi mismo si toda esta locura puede tener algún sentido, si tengo alguna posibilidad real de, con estas condiciones, conseguir mi objetivo, si salir corriendo para entrenar media hora puede servir para algo, lo que un filosofo llamaría dudas existenciales en toda regla.

5 largos, unos giros y listo para lanzar, 12 tiros, recogida y con el estress que no encontraba la cartera (luego estaba en el coche), sin tiempo para hablar con los veteranos de su batallita en el Nacional, y pitando para abajo que iba fuera de tiempo, casi con un ataque de ansiedad por el episodio de la cartera. Y a prepararse, porque a partir de ahora, dos semanas así (o peor), menos mal que conseguí sacar algunas conclusiones del trabajo técnico, y, que coño porque no decirlo, estuve tirando fácil más de 18 con el chandall del cole (se me olvido hasta la ropa de entrenar), igual hay esperanzas para seguir creyendo que llegar al final es posible.

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